15 de abril, 2007

Berkeley vs. Stanford

Las comparaciones siempre son odiosas, pero en este caso casi nos resulta inevitable. Fuimos a Berkeley el 28 de marzo, y aunque la mayoría de los alumnos estaban de vacaciones, había ambientillo. En Stanford estuvimos el pasado 11 de abril, hace 3 días. Las dos son geniales, con una idea de campus como la que todos hemos visto en las películas, que por cierto me parece genial. Berkeley es preciosa, la verdad es que disfrutamos el día un montón, y hicimos un pequeño tour con una alumna. Aquí os pongo una foto de una parte del edificio de ciencias.

bacteriology en Berkeley

Tiene un montón de zonas verdes, como bosquecitos y también de jardines. En definitiva, muy chula.

En Stanford, la sensación es diferente, porque la idea es la misma, pero en enorme. Berkeley parece de juguete, monísima. Y Stanford es más impresionante, todo a lo grande, entre edificios hay más explanadas verdes, hay varias líneas de autobús por el campus, lleno de bicicletas, tienen un jardín con esculturas de A. Rodin, otro con un tótem, … En general los edificios tienen un estilo más homogéneo, al menos los más antiguos en la zona central del campus.

patio central Stanford

En cualquier caso, a mí no me importaría pasar una temporada en cualquiera de las dos, estudiando algo o trabajando, me parecieron increibles, y con ese toque de universidad americana que le da cierto encanto, supongo que porque en parte parece que estés dentro de una película… jeje.

13 de abril, 2007

Al norte de la bahía

Hemos pasado el día al norte de la bahía de San Francisco, por Marín, zona por la que apenas hemos hecho turismo. Alicia nos ha llevado por San Rafael y San Anselmo hasta la playa de Stinson, Millvalley y Tiburón.

Stinson Beach

La playa de Stinson (en la foto) está muy chula, es muy larga, y está muy poco explotado así que hay muchísma vegetación, bosque, montaña, y pasamos por un lago antes de llegar a la playa donde hay mucha vida en general: leones marinos, focas, … muy simpático, y luego hemos comido en un sitio por allí. Después hemos ido por la carretera de la costa hasta Muir Beach para ir a Millvalley, un pueblecito muy mono. Y hemos acabado con un paseo por Tiburon y unos margaritas en un bar que hay en el muelle mirando la ciudad de San Francisco.

Bueno, en realidad no hemos acabado, porque luego hemos ido a tomar algo a la ciudad, pero eso son «puntos suspensivos»… jeje

12 de abril, 2007

Ardillas

Me he quedado realmente sorprendida de la cantidad de ardillas que hay en este país! A más de uno le parecerá una bobada, total ardillas también hay en España, será por pinares…, pero es que realmente hay muchísimas.

Al poco de llegar estuvimos pasando el día en Santa Rosa, y estuvimos en un parque muy bonito donde había un montón de plantas diferentes, y cruces curiosos, más que un parque un jardín botánico-invernadero de un hombre que dedicó su vida a esto. Bueno, la cosa es que vimos un par de ardillas, que además eran relativamente sociables, y nos hizo tanta gracia, que hicimos un montón de fotos, y hasta grabamos un mini-video.

Ahora, casi tres meses más tarde, me he dado cuenta de lo tonto de aquello, porque hay muchísmas ardillas en todas partes. Las hemos vistos en todo tipo de parajes, y a cual más sociable, que a alguna sólo le ha faltado pedir el almuerzo, porque no sólo no se asustan, sino que se te acercan curiosas a ver qué te cuentas.

ardilla GGP

Ésta tan sociable fue en el Golden Gate Park. Me llamó la atención verlas al lado de la playa en un trozo donde sólo había tierra, y apenas vegetación, y eso sí que estaba lleno, además en cuanto te quedabas un poco quieto empezaban a salir por todas partes y había muchísmas. También las hemos visto en Yosemite y en el lago Tahoe, que las había también de la variedad «Chip y Chop» (no sé cómo se llaman, pero creo que todos me entendéis, con la rayita lanca en el lomo).

En resumen: muchas, muy variadas y muy sociables.

9 de abril, 2007

Última etapa

Lo primero que vemos al despertar son las montañas que rodean el lago Tahoe nevadas. Es una vista preciosa, y fría… Nos hemos ido a desayunar al lado del hotel, porque el hotel genial con jacuzzi y eso, pero el desayuno…, nada bueno. Y luego nos hemos acercado al lago a verlo, vista más espectacular aún, es tan grande que tiene olas y todo, y sus playitas.

lake Tahoe playa

En el lado sur hay una parte que tiene canales y las casas tienen su propio embarcadero cada una. Hemos rodeado todo el lago por el lado oeste, subiendo aún más en altitud y bajando de nuevo, con unas vistas geniales. Hay una parte que a cada lado de la carretera hay un lago, el Lake Tahoe y Cascade Lake, y se ve chulísimo. Y luego una bahía, Emerald Bay, desde el que hay un mirador para ver el lago y hay una islita, Fannette Island que tiene un castillito, y en ese lado del lago abajo del todo se ve una casa, bueno un castillo, escandinavo.

Seguimos subiendo hacia el norte del lago, y finalmente comimos en Tahoe City. Por el camino, la carretera va al lado del agua, y al nivel del agua, y es muy bonito ver el lago, al lado de la nieve y con muchos mini-embarcaderos. Es curioso estar tan altos en altitud y a la vez que el agua esté a tu nivel. En Tahoe City se podía ir por uno de los muelles, quen normalmente están cerrados, son privados.

Y finalmente ya cogimos el camino de vuelta a San Francisco, o mejor dicho, a Oakland International Airport que es donde había que entregar el coche. Pasamos por Truckee, Applegate, Sacramento, Vacaville, Vallejo, vista de la bahía de San Pablo, Richmond, Berkeley y Oakland.

Dejamos el coche, y cogimos el shuttle bus del «centro de alquiler de coches» al aeropuerto, el shuttle-bus del aeropuerto al BART (el tren), el BART de Oakland a San Francisco y el MUNI (el autobús) hasta casita.

8 de abril, 2007

Sol y nieve

Buenos días Fresno!

Aquí hace sol y calor, y además, es el primer hotel en el que los dos cuadros que hay en la habitación son distintos entre sí, no sólo en el marco, sino también el dibujo… Pensábamos haber ido a ver unos jardines subterráneos que hay, que deben ser chulos, pero están cerrados porque los están arreglando, mantenimiento. Así que cogemos carretera y rumbo a Yosemite Park!

La idea inicial era atravesar el parque de oeste a este, pero la carretera que lo cruza está cortada porque empiezan a limpiar la nieve en abril o así, y tardan un par de meses, así que hasta junio no se puede transitar, y es que puedes ver una webcam y comprobar tú mismo el estado de la carretera, y hay al menos dos metros de nieve!

Nada más entrar en el parque al pagar, te dan un plano del parque y el periódico del mes del parque con noticias, calendario de actividades, … Estuvimos justo debajo de una de las cascadas del parque, impresionante todo ese agua en caída libre a escasos metros de tí, y que te deja calado…

cascada Yosemite

Y ya casi se nos hizo la hora de comer así que buscamos una zona de picnic, paramos en Cathedral Beach, que como su propio nombre indica, es una playita que hay con sus bancos de picnic al lado.

Seguimos por la carretera, más cascadas, sequoyas, … y encontramos un tramo en el que había mucha nieve, limpia, sin pisar ni usar, así que paramos un poquito. Luego llegamos a Merced Grove, donde había una ruta de 1,5 millas para ver unas sequoyas gigantes, pero lo que no decía el cartel era lo empinado del camino…, agotador. Aún así una ruta muy bonita. Y ya salimos del parque con destino el Lago Tahoe.

Por el camino pasamos por Sonora, Angels Camp, … y por un lago con nombre simpático: New Melones Lake.

Tuvimos que volver a cambiar la ruta prevista, porque la Highway 4 estaba cortada por la nieve en algunos puntos. La ruta alternativa que cogimos estaba abierta, Highway 88, pero también se veía muchísima nieve, como un metro o así a los lados de la carretera y se veía como si la hubiesen cortado con sierra para abrir el camino. Además en el termómetro del coche íbamos viendo cómo bajaba la tempertura a medida que subíamos en altitud… hasta más de 8000 pies y 3ºC!

Finalmente llegamos a South Lake Tahoe y esta vez teníamos más o menos previsto el alojamiento: un hotel que tenía habitaciones con jacuzzi, baño relajante y calentito después de un largo viaje.

Fin del sexto día de Road Trip.

7 de abril, 2007

Despertar en San Diego

Nos hemos levantado, y está nublado otra vez. Por la mañana hemos estado viendo San Diego, la ciudad de la que todo el mundo habla bien. Primero hemos ido al puerto, donde el museo marítimo es una flota de barcos, 5 ó 6. No hemos entrado, los hemos visto por fuera: un barco pirata (o una réplica), el submarino del «Octubre Rojo», el barco de «Master and Commander», … Y también hemos visto el portaaviones Midway: simplemente enorme.

Luego hemos estado Seaport Village, que es una zona de tiendecitas y restaurantes muy mona, y luego en el Gaslamp con muchos muchísmos restaurantes, bares, tiendas, … muy bonito, y normalmente animado. Digo «normalmente animado» porque ayer por la noche se veía llenísimo, y esta mañana no había nadie por la calle, debían estar de resaca, porque ayer jugaron Los Padres, el equipo local de béisbol y la fiesta debió de ser buena porque ganaron. Por cierto que en el Gaslamp había un par de sitios españoles con nombre muy español: «Olé Madrid» y «La Gran Tapa».

Hemos pasado por Balboa Park, un parque genial, con un montón de cosas, museos y el internacionalmente famoso Zoo de San Diego. Al salir de la ciudad hemos pasado por el Mission Bay Park y hemos hecho allí el picnic, al lado de una de las playas de la bahía de San Diego.

Volvemos a nuestra ruta dirección Yosemite Park, esta vez por la Interestatal 5, algo más rápida hacia L.A., Santa Clarita, en Bakersfield el desvío hacia Fresno por la Interestatal 99. Y en Fresno a descansar, que hoy también nos lo hemos ganado…

Fin del quinto día del Road Trip.

Cruzamos la frontera!

Por la tarde noche nos vinieron a buscar unos amigos al hotel. Primero nos llevaron a dar una vuelta por Old Town y la Plaza del Pasado, que es como la zona antigua de San Diego. Pensábamos ir a cenar por allí pero finalmente nos llevaron a Méjico. Nosotros pensábamos que no podíamos salir del país, pero resulta que sí. Así que nos fuimos a Tijuana a un sitio típico de comida mejicana, donde sorprendentemente pude comer comida NO picante, mejicana y bien rica.

Antes de llegar a la frontera hay que pasar una colina, y la vista de Tijuana al empezar a bajar la colina es impresionante, sobretodo cuando esperas ver un pueblecito pequeño, como nos pasó a nosotros, y ves la siguiente colina poblada de lucecitas, sin un solo hueco. Y es que resulta que Tijuana no tiene nada de pequeñito, sino todo los contrario, es una ciudad de casi dos millones de habitantes distribuidos en casas de una sola planta, porque no hay grandes edificios.

El restaurante está hiper-decorado, con unas vigas con refranes, las paredes llenas de carteles de corridas de toros, incluidas algunas en la plaza de toros de Las Ventas en Madrid, y tiene el techo lleno de tarjetas con dibujos. Son el bingo al que se juega en Méjico, que en vez de números son cartas con dibujos, y además tiene su propio lenguaje, que por supuesto tienes que conocer para poder enterarte de si ganas o pierdes.

Nos dieron una vuelta (en coche y con el seguro echado) por la zona más «alternativa», y que da la mala fama a Tijuana, con bares y otros «atractivos». Vimos algo que me pareció simpático: una «paletería», es decir, una tienda de «paletas», o sea, helados.

Volvimos a dormir al hotel y fin del cuarto día… cansados pero contentos, hemos estado en Méjico!

6 de abril, 2007

Vistas por la mañana…

Buscar hotel de noche tiene ventajas e inconvenientes. La ventaja es que en muchos sitios te ofrecen un precio algo más barato del habitual, supongo que es mejor para ellos ganar algo de dinero que no ganar nada por tener la habitación vacía esa noche. El inconveniente es que no ves a donde da tu ventana hasta que amanece… Y en Oceanside el hotel estaba muy bien, el desayuno también, la habitación, de las mejores de los últimos días, y tenía piscina y jacuzzi (aunque esta vez no tuvimos tiempo de disfrutarlo), pero la ventana daba a un parking de cutre-caravanas debajo de la carretera. De todos modos, podía haber sido peor.

Desayunamos, recogimos y planeamos el día y nos fuimos a dar una vuelta por Oceanside: el puerto y la playa, donde desemboca el río San Luis. Seguimos por la Ruta 101 hacia Carlsbad, donde paramos a ver la playa, y había ardillas, aunque de ellas hablaré otro día; y por cierto, donde está el Legoland Park. Encinitas, Solana Beach, Del Mar y en La Joya paramos a comer.

La playa de La Joya era un tanto diferente, al menos en La Joya Cove, tenía poca arena, y era como de rocas, pero muy redondeadas, y además había «piscinitas» donde se quedaba el agua. Es difícil de explicar, así que intentad haceros una idea con la foto:

Joya Cove

Después del picnic y el paseo seguimos hasta San Diego, por fin. Pasamos por Mission Beach y Pacific Beach que ya pertenecen a San Diego, pero seguimos hasta el centro de la ciudad, porque por primera vez en este viaje, llegamos prontito al destino marcado para el día!

5 de abril, 2007

Hollywoodland

Hemos vuelto a madrugar, en el hotel de Los Ángeles el desayuno ha sido más rico que en otros, así que con buen ánimo planeamos el día, aunque siga nublado. Hemos leído que en L.A. siempre hay una neblina perpetua por la contaminación y la humedad del ambiente.

Lo primero hemos ido a Santa Mónica a la playa a dar una vuelta, nos hemos alquilado unas bicis y hemos ido hasta Santa Monica Pier, donde está el acuario y un parque de atracciones. Aquí hay un montón de ciudades que tienen parque de atracciones en uno de sus muelles, es chulo con el mar y la playa al lado.

Luego hemos ido a Beverly Hills a comer en Rodeo Drive, la famosa calle de tiendas donde está Channel, Tiffany, Versace, Yves Saint Lauren, Dior, Armani, … Son un par de calles las que más tiendas tienen, y Rodeo Drive es realmente bonita, con muchas flores y hasta el diseño de cada tienda es especial. Y por encima de estas calles está lleno de las espectaculares mansiones que vemos en las pelis, entre las que están las de los famosos, que son las que más altos tienen los setos.

Hollywood Boulevard: el paseo de las estrellas. Nos sorprendió, porque al menos yo, tenía la idea de algo más grande y más concentrado, y en realidad es una calle muy larga con su acera normal y corriente donde están las estrellas en el suelo. Además en cuanto te sales de la calle principal da la impresión de no ser el mejor de los barrios para pasear por la noche…

Aquí estoy con la estrella de Mickey Mouse.

estrella de Mickey Mouse

Después hemos ido a ver la también famosa señal de Hollywood, que inicialmente decía «Hollywoodland». Cogimos la carretera y nos acercamos por la zona de los estudios de cine y eso, pero ni entramos ni paramos, sólo para hacernos una idea y ver lo grande, descomunal, … que son, al menos Universal Studios que son los que más se ven.

Ya volvimos a nuestra ruta, pero atravesamos Downtown L.A. con el coche. La verdad es que nos impresionó mucho, porque todo el mundo nos había dicho que seguramente L.A. nos iba a decepcionar, y a mí me gustó mucho. Vale que no lo hemos visto muy en profundidad, pero me gustó.

Seguimos por San Pedro, L.A. Port que tiene una vista nocturna impresionante, Long Beach y Huntington Beach con hogueras hechas a lo largo de toda la playa, y nos gustó tanto (aunque ya de noche) que estuvimos a punto de quedarnos, Laguna Beach, … y finalmente llegamos a Oceanside a pasar la noche y descansar merecidamente.

Todo nos gusta tanto que todo el rato estamos pensando si quedarnos y no continuar el viaje. Nos gustaría verlo todo pero no tenemos tiempo. De todos modos nos lo estamos pasando genial.

Fin del tercer día del Road Trip.

Oops… Los Ángeles!

De Santa Bárbara cogimos de nuevo la ruta 101 y seguimos la ruta. Seguimos por Ventura, donde volvimos a la Highway 1 para ir bordeando la costa, y llegamos a Malibú, Topanga, Santa Mónica, y de repente estábamos en Los Ángeles!

Antes de llegar a Malibú empezamos a ver unos sitios fenomenales de los que disfrutar de día (ya se nos había hecho de noche…), así que empezamos a buscar un sitio donde dormir: misión imposible, en Malibú hay unas playas fantásticas y unas casa increibles, pero de hoteles… poca cosa, sólo encontramos dos, que ni nos dieron buena espina, ni eran baratos.

Así que seguimos, seguimos, seguimos, … y sin querer estábamos en L.A., concretamente en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles. Como no conocíamos nada, ni teniamos ni idea de que zonas eran buenas, malas, peores o intransitables, pues buscamos hotel en LAX, y a las 11:30 de la noche, por fin descansamos.

Nos quedamos con las ganas de volver y disfrutar un poco más del camino, que era la idea al ver las primeras casas de Malibú. La carretera pasa a unos metros del mar y la playa, y hay casas que están literalmente en el mar, es decir, los cimientos están bañados por el Pacífico! Eso sí que es primera linea de mar y lo demás bobadas… jeje.

Aún así la vista nocturna de todos los barrios residenciales y las playas también es espectacular, y a lo mejor más que las vistas de día. Un día agotador aunque genial. Lo estamos disfrutando todo muchísimo.

Fin del segundo día del Road Trip.